AGENCIA
Internacional.- Después de una década de misterio y búsqueda infructuosa, el enigma del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, desaparecido sin dejar rastro, podría estar más cerca de resolverse. Investigadores británicos han detectado una nueva señal que podría indicar la ubicación del avión desaparecido, según informó la Universidad de Cardiff.
La señal fue captada por hidrófonos (micrófonos de agua) en el momento en que se presume que el MH370 se estrelló el 8 de marzo de 2014. Aunque esta señal tiene una duración de solo seis segundos, se necesitarán más pruebas para determinar la localización exacta del lugar del accidente.
El vuelo MH370 despegó de Kuala Lumpur con 239 personas a bordo con destino a Beijing, pero aproximadamente 40 minutos después desapareció de los radares civiles de Malasia. Desde entonces, las búsquedas exhaustivas no han logrado encontrar los restos del avión.
Los investigadores han analizado más de 100 horas de datos de hidrófonos obtenidos tras diez accidentes aéreos históricos y la desaparición de un submarino. Estos datos ofrecen nuevas perspectivas sobre la búsqueda del MH370. Los resultados, publicados en Scientific Reports, sugieren la necesidad de una investigación más detallada en la última ubicación conocida de la aeronave.
El Dr. Usama Kadri, profesor de la Facultad de Matemáticas de la Universidad de Cardiff, explicó: “Nuestro análisis muestra que los hidrófonos detectaron señales claras de presión de accidentes aéreos anteriores, incluso a distancias superiores a 3 mil km”. Kadri añadió que el posible punto de impacto está cerca del séptimo arco, donde se produjo la última comunicación entre el avión e INMARSAT.
Para comprender plenamente las señales detectadas y su relación con la desaparición del MH370, el Dr. Kadri sugirió que las autoridades realicen experimentos de campo con explosiones controladas o armas de aire a lo largo del séptimo arco, monitoreando las señales recibidas en estaciones hidroacústicas circundantes. Ejercicios similares se llevaron a cabo en la búsqueda del submarino argentino ARA San Juan, encontrado en 2017, demostrando ser factibles y potencialmente útiles.
“La desaparición del MH370 motivó este trabajo, planteando dudas sobre la detectabilidad de accidentes aéreos en el océano y el uso potencial de la tecnología hidroacústica para ayudar en los esfuerzos de búsqueda y rescate. Aunque aún no hemos encontrado una señal con la certeza necesaria para iniciar una nueva búsqueda, siguiendo nuestras recomendaciones, podríamos arrojar luz sobre la ubicación del MH370”, concluyó el Dr. Kadri.
La comunidad internacional espera con cautela los resultados de estos nuevos análisis y experimentos, con la esperanza de que finalmente se pueda resolver uno de los mayores misterios de la aviación moderna.