AGENCIA
Nacional.- Una de las mayores y más inaceptables distorsiones de la economía es la persistencia del trabajo infantil. La Organización Mundial del Trabajo ha considerado en distintas publicaciones que este fenómeno constituye una “plaga” que debe ser erradicada, pues las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a crecer con la plena garantía de sus derechos, y no verse obligados a trabajar para contribuir con el ingreso de sus familias.
En México, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 13.1 por ciento (%) de las y los niños y adolescentes de 5 a 17 años se encontraban en situación de trabajo infantil. En números absolutos, esto representa 3.7 millones de menores en esta condición.
Entre estos menores, el 42.7% declaró que no asiste a la escuela, es decir, una suma de 1.58 millones. El resto, 2.3 millones, además de trabajar, también asisten a la escuela. Este dato se traduce en que tres de cada 10 niñas y niños en trabajo infantil no asisten a la escuela, con una inasistencia mayor entre varones, alcanzando el 32%, mientras que entre las niñas es del 27 por ciento.
Una marcada tendencia en la distribución de las actividades laborales entre menores se observa según su sexo. En el análisis del trabajo doméstico en condiciones no adecuadas, se encontró que el 30.8 por ciento de las niñas y adolescentes trabajaron más de 28 horas semanales en ese tipo de actividades, mientras que entre los niños y adolescentes varones el porcentaje fue del 8.5%. Este dato subraya que la asignación de tareas domésticas, tanto remuneradas como no remuneradas, sigue recayendo mayoritariamente en las niñas.
El INEGI también destaca que, a medida que las niñas, niños y adolescentes cumplen más años, son incorporados en mayor proporción al mundo laboral. En el grupo de 5 a 9 años, el 10.8% estaban en condición de trabajo infantil en 2021, siendo el porcentaje entre las mujeres del 12.5% y entre los hombres del 9.6%.
Para el grupo de 10 a 14 años, el 40.4% del total trabajaban, con una incidencia del 42% entre las niñas y del 39.3% entre los niños. En el grupo de 15 a 17 años, el 48.9% declaró estar en condiciones de trabajo infantil, con un porcentaje del 45.5% entre las mujeres y del 51% entre los hombres.
De los 3.7 millones de niñas y niños que trabajan, 1.6 millones laboraban en 2021 en actividades no permitidas para su edad, cifra que equivale al 7.5% del total de niñas, niños y adolescentes en el país. De estos menores, el 43.3 por ciento trabajaba por debajo de la edad mínima permitida para trabajar (15 años), mientras que el 56.7% se encontraba en ocupaciones peligrosas.
Entre quienes estaban en ocupaciones no permitidas, el 58.1% se ubicó como persona subordinada y remunerada, el 37.4% no recibía remuneración, y el 4.3% declaró “trabajar por cuenta propia”.
La persistencia del trabajo infantil en México es un desafío que requiere acciones urgentes y decididas para garantizar los derechos de niñas, niños y adolescentes, permitiéndoles crecer en un entorno adecuado y seguro, lejos de la explotación laboral.