De la Redacción
El Buen Tono
Región.- La reciente ola de victorias electorales de Morena en Veracruz es una señal clara del hartazgo ciudadano hacia la corrupción y la impunidad que han caracterizado a los partidos de oposición, particularmente el PAN y el PRI.
Mientras en estos partidos sigan personajes como Juan Lavín, Leticia López, Juan Bueno, Tomás Ríos, Pepe Yunes, el Clan Yunes encabezado por Miguel Ángel Yunes Linares, el electorado seguirá apoyando a Morena.
La continuidad de estos políticos, muchos de los cuales están señalados por actos de corrupción y enriquecimiento ilícito, ha asqueado la confianza pública en el PAN y el PRI.
Juan Lavín, ex alcalde de Córdoba, ha sido cuestionado por su gestión y manejo de recursos, al igual que Leticia López, quien enfrentó múltiples acusaciones de desvío de fondos. Juan Bueno, como diputado, ha sido señalado por su falta de transparencia.
Tomás Ríos, otro ex alcalde de Córdoba, no ha escapado a las críticas por presuntos actos de corrupción.
Los Yunes, con Miguel Ángel Yunes Linares a la cabeza, tienen una historia de acusaciones y escándalos que han manchado la reputación del PAN en el estado.
La percepción de que estos personajes siguen beneficiándose de la impunidad y acumulando riquezas ilícitamente, ha desencadenado una fuerte reacción en el electorado. Los votantes están claramente cansados de una política que privilegia a unos pocos a costa del bienestar de la mayoría. Este descontento se ha traducido en un apoyo masivo a Morena, visto como una alternativa a los viejos vicios del poder.
