Agencias
Una trágica historia ocurrida en la Clínica Cruz Azul de Necochea, Argentina, volvió a la luz recientemente cuando un juez condenó al doctor Vicente Martín por “homicidio culposo” de Marta Acosta, una mujer de 71 años. Marta falleció en el hospital después de que le administraron diclofenaco, a pesar de ser alérgica al medicamento.
El hijo de Marta, Fabián Martínez, relató que el médico conocía la alergia de su madre, ya que había sido tratada previamente en la clínica y había informado al personal sobre su condición. A pesar de esto, el 8 de junio de 2018, una enfermera le administró diclofenaco por vía intravenosa sin verificar su historial de alergias.
Cuando Fabián se dio cuenta del error, llamó a las enfermeras, pero ya era demasiado tarde. Marta fue trasladada a terapia intensiva, donde sufrió dos paros cardíacos y dos accidentes cerebrovasculares antes de fallecer al día siguiente.
El médico intentó llegar a un acuerdo con la familia, pero no tuvo éxito. Alegó que nadie le informó sobre la alergia de Marta al diclofenaco y se disculpó con la familia, afirmando: “Si ustedes creen que yo soy culpable, les pido disculpas”. La investigación reveló que el médico no había leído el historial clínico de Marta, donde constaba su alergia al diclofenaco, un paso obligatorio en el quirófano.
La sentencia contra el médico incluyó 2 años y 10 meses de ejecución condicional y 8 años de inhabilitación para ejercer la medicina, aunque podrá seguir trabajando hasta que la sentencia quede firme.
