Agencias
Ecuador.- La policía de Ecuador detuvo a un hijo del expresidente Abdalá Bucaram y a 150 personas más en una finca en las afueras de Guayaquil, en medio de una investigación relacionada con el narcotráfico. Durante una fiesta, se incautaron varias armas de fuego y equipos de comunicación. La fiscalía informó que entre los detenidos se encuentra un presunto líder criminal, aunque no reveló su identidad.
El hijo de Bucaram, Jacobo Bucaram Pulley, estaba entre los invitados a la fiesta. Esta no es la primera vez que enfrenta problemas legales, ya que en septiembre de 2020 fue extraditado desde Medellín, Colombia, por su presunta participación en una red de corrupción en hospitales del Seguro Social de Ecuador, donde también está implicado su padre.
En respuesta a la creciente violencia en el país, el gobierno de Ecuador declaró el estado de conflicto armado interno a principios de año, permitiendo la acción conjunta de policías y militares para controlar la seguridad. Ecuador cerró el año 2023 como el más violento de su historia, con un aumento significativo en el número de asesinatos en comparación con años anteriores.
La policía de Ecuador detuvo a un hijo del expresidente Abdalá Bucaram y a 150 personas más en una finca en las afueras de Guayaquil, en medio de una investigación relacionada con el narcotráfico. Durante una fiesta, se incautaron varias armas de fuego y equipos de comunicación. La fiscalía informó que entre los detenidos se encuentra un presunto líder criminal, aunque no reveló su identidad.
El hijo de Bucaram, Jacobo Bucaram Pulley, estaba entre los invitados a la fiesta. Esta no es la primera vez que enfrenta problemas legales, ya que en septiembre de 2020 fue extraditado desde Medellín, Colombia, por su presunta participación en una red de corrupción en hospitales del Seguro Social de Ecuador, donde también está implicado su padre.
En respuesta a la creciente violencia en el país, el gobierno de Ecuador declaró el estado de conflicto armado interno a principios de año, permitiendo la acción conjunta de policías y militares para controlar la seguridad. Ecuador cerró el año 2023 como el más violento de su historia, con un aumento significativo en el número de asesinatos en comparación con años anteriores.