De la Redacción
El Buen Tono
Boca Del Río.- El candidato al Senado por el PAN, Miguel Ángel Yunes Márquez, declaró ayer que son víctima de una persecución judicial, usando la misma maña de las changas viejas de los políticos.
Andan de ladrones y cuando se ven envueltos en los señalamientos y quieren meterlos a la cárcel, por rateros, acusan que es una persecución política diciendo que el gobierno en el poder no es democrático, sino es autoritario y dictador, y les funciona porque ya no los juzgan.
La misma situación ocurrió con el entonces candidato a la presidencia, Ricardo Anaya, cuando le detectaron que había vendido una bodega en $50 millones, y no pagó impuestos por esa venta, lo detectaron los del SAT y acusó guerra política, entonces el panista tenía como contrincante a AMLO y señaló represión.
Lo mismo están haciendo los Yunes, a quienes van a encarcelar por rateros. Aunque ellos aseguran que les van a querer meter a la cárcel a ocho candidatos porque no quieren competencia.
Yunes Márquez ha robado a Veracruz desde antes de ser político, era estudiante y ya le estaba robando al Estado. Y de su papá, ni se diga, ha robado desde que antes que naciera Duarte y el caso más sonado es la compra fraudulenta de las videocámaras del Sistema de Vigilancia del C4.
Este fin de semana, ante el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, quien llegó a respaldar a esta familia de rateros, Yunes Márquez dio su discurso acusando al Gobierno de represor, con el fin de quedar impunes por su corrupción.