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Soconusco.- En el municipio de Soconusco, al sur del estado de Veracruz, se encuentra un pozo que solo es utilizado una vez al año para obtener un producto único: la sal rosada o sal rosa. Con más de 500 años de historia, esta sal es famosa por su característico color rosa, y existen varias leyendas sobre su origen.
Algunos dicen que el tono proviene de la sangre derramada por guerreros antiguos, mientras que otros atribuyen su color a las bondades de la naturaleza. Sin importar la historia exacta, lo cierto es que el pozo se mantiene activo y la extracción de la sal es una tradición ancestral.
Según la leyenda local, el pozo de la sal fue excavado por soldados de Moctezuma hace unos 500 años. Buscaban agua para saciar su sed, pero encontraron agua salada en lugar de dulce, lo que enfureció a los guerreros, quienes acabaron con los hombres que construyeron el pozo. La historia cuenta que la sangre de estos soldados se mezcló con el agua, dando lugar a la sal rosada. A lo largo del tiempo, los pobladores originarios supieron la importancia de esta fuente salina y la defendieron de los españoles, a costa de muchas vidas, pero lograron preservar su legado.
El proceso de extracción de la sal rosada ocurre entre abril y mayo, hacia el final de la primavera. Los habitantes de la comunidad de Benito Juárez, situada a unos 5 kilómetros de la cabecera municipal de Soconusco, sacan el agua del pozo de forma artesanal, utilizando cubetas y cuerdas. Luego, el agua se lleva a grandes pailas para ser hervida a fuego de leña al aire libre. El proceso de cocción puede durar más de una hora, pero las tacualeras, mujeres encargadas del proceso, deben mantener el fuego encendido durante toda la noche para asegurar la correcta evaporación del agua y la formación de los bloques de sal rosada.
Una vez que la sal comienza a formarse, se coloca en cestos para secarla y posteriormente se empaqueta para su distribución. Este proceso artesanal y natural se ha mantenido intacto durante siglos y es único en su tipo, ya que no utiliza químicos ni aditivos, lo que la hace más saludable.
Para celebrar esta tradición, desde 1989 se realiza la “Feria Cultural de la Sal”, donde se eligen una Reina de la Sal y un Rey del Tzamo (piedra de sal), además de otros eventos culturales y ceremonias relacionadas con la sal rosada. Durante esta feria, se puede ver de cerca el proceso de extracción de la sal y disfrutar de actividades culturales que honran esta tradición ancestral.
Si estás interesado en conocer la sal rosada de Soconusco, tendrás que esperar al próximo año, ya que, en 2024, la Bendición del Pozo y el Ritual de Cocimiento de la Sal de Salina se realizaron el pasado 19 de abril en el Centro Ceremonial La Salina, Ejido Benito Juárez. La feria es una oportunidad única para aprender más sobre esta tradición veracruzana y disfrutar de su rica historia y cultura.
