El ataque aéreo en Gaza durante la madrugada del martes resultó en la muerte de cuatro trabajadores humanitarios extranjeros afiliados a la organización World Central Kitchen (WCK) y al menos un palestino en Deir al Balah. Según informaciones locales, los fallecidos incluyen a ciudadanos británicos, polacos, australianos e irlandeses, junto con un palestino que trabajaba como conductor. Los cuerpos, identificados por sus chalecos antibalas y cascos con el logo de WCK, fueron trasladados al Hospital Mártires de al Aqsa en Deir al Balah.
El Ejército israelí ha comunicado que está llevando a cabo una revisión exhaustiva del incidente para comprender las circunstancias del ataque, señalando su cooperación previa con WCK para la distribución de alimentos y ayuda humanitaria en Gaza. Esta tragedia se produce en un contexto de recrudecimiento de los combates en Gaza, con la escalada de tensiones que ha dejado un alto número de víctimas en las últimas horas.
La Casa Blanca expresó su profunda preocupación y pesar por este incidente, instando a Israel a realizar una investigación rápida sobre lo sucedido y recordando la importancia de proteger a los trabajadores humanitarios que brindan asistencia crucial en zonas de conflicto. La comunidad internacional sigue de cerca la situación en Gaza, instando a todas las partes involucradas a trabajar hacia una solución pacífica y sostenible para el conflicto en la región.