Bad Bunny, el reconocido artista puertorriqueño, ha sido una figura destacada en la escena musical durante años, pero recientemente ha experimentado algunos contratiempos. A pesar de su exitosa carrera que lo llevó a ser uno de los headliners de Coachella en 2023, parece que su popularidad está disminuyendo gradualmente.
El lanzamiento de su último álbum, “Nadie sabe lo que va a pasar mañana”, no alcanzó el mismo éxito que sus trabajos anteriores, lo que podría indicar un cambio en la tendencia de su carrera. Aunque inició una gira en Estados Unidos para promocionar el álbum, no se han anunciado fechas para México y América Latina, lo que ha generado especulaciones sobre su futuro.
Un evento reciente en Minnesota podría ser un indicador de esta posible disminución en su popularidad. Un concierto programado para el pasado 23 de marzo fue cancelado debido a la baja venta de boletos. Ticketmaster tuvo que emitir un comunicado ofreciendo reembolsos a aquellos que ya habían comprado entradas para el espectáculo.
Aunque el público esperaba con ansias el regreso de Bad Bunny a Minnesota, parece que la falta de interés fue evidente. Según informes, el Target Center, donde se llevaría a cabo el concierto, tenía más de la mitad de sus asientos sin vender. Los altos precios de las entradas podrían haber sido un factor determinante, ya que oscilaban entre 122 y más de 600 dólares.
Este contratiempo podría ser un llamado de atención para Bad Bunny y su equipo, quienes podrían considerar ajustes en sus estrategias de promoción y precios para futuros eventos. Aunque su popularidad podría estar en una fase de transición, queda por ver cómo manejará el artista esta situación y si logrará recuperar el fervor de sus seguidores.