Juan José E.
El Buen Tono
Orizaba.- Los jóvenes que cometieron parricidio no deben ir a prisión sino a una terapia psicoemocional por el trauma sufrido ante una violencia sistemática que han vivido desde infantes, señaló la directora del colectivo Cihuatlahtolli, María de la Cruz Jaimes García.
Sobre lo dicho por autoridades estatales de que se va a proceder de forma justa, en contra de los dos adolescentes que mataron a su padre mientras intentaban defender a su madre de la violencia que estaba sufriendo, la activista dijo que sería otra injusticia, dado que los jóvenes son víctimas de un sistema violento, víctimas de una sociedad violenta y que sólo actuaron en defensa propia, y así se les debe juzgar en ese asunto para ser justos.
“Imagínate, tienen que enfrentarse a esta violencia que seguramente en base a lo que sé del asunto, es una violencia sistemática que todos los días viven de manera cotidiana, es una violencia extrema, que pone en riesgo la vida y la seguridad de las mujeres y de los niños y llegó el momento en que es tan grave la situación, que tuvieron esa disyuntiva de decidir entre la vida y la muerte de su mamá”.
Agregó que la mayoría de las personas expondrían que actuaron en defensa propia a favor de su mamá.
La activista enfatizó que a los dos menores se les debe dar atención psicológica especial, pues además son víctimas de la violencia sistemática que existe y se les debe llevar un proceso, pero no penal, sino de recuperación, toda su vida sufrieron porque la violencia afecta fuertemente, trastoca la vida de las personas y más en este caso de los adolescentes que están empezando en su desarrollo emocional.
