La historia de Don Francisco Islas Pontaza, conocido cariñosamente como Don Perico, ha conmovido a muchos en las redes sociales. A sus 96 años, este abuelito que vivía solo en Epazoyucan, estado de Hidalgo, tomó una decisión que ha dejado una huella profunda en quienes la conocen.
Don Perico decidió utilizar el adelanto de la Pensión del Bienestar para pagar su propio funeral. Aunque no tenía familiares que lo visitaran o cuidaran, confió en una vecina para administrar sus recursos.
Cuando el gobierno adelantó las pensiones para evitar que coincidieran con temas electorales, Don Perico le pidió a su vecina que guardara el dinero que le habían depositado, para utilizarlo en caso de necesidad.
Lamentablemente, Don Perico falleció, y al no tener familiares cercanos, su vecina se encargó de organizar un funeral digno para él.
Gracias al dinero que había confiado a su vecina, pudieron costear los gastos del funeral. Sin embargo, ninguno de sus familiares se presentó en el funeral, y fueron solo los vecinos quienes le dieron el último adiós a Don Perico, llevándole flores y mostrándole su respeto.
Esta historia ha generado una gran atención en las redes sociales, donde muchos usuarios han expresado su conmoción y admiración por la actitud de Don Perico y la solidaridad de su vecina. Su historia nos recuerda la importancia de la previsión y la solidaridad en momentos difíciles.
