AGENCIA
Nacional.- Jesús Carrillo, director de Economía del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), calificó como un fracaso para Petróleos Mexicanos (Pemex) el hecho de que, a pesar de haber recibido aproximadamente 1.5 billones de pesos de apoyo durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, no haya logrado reducir considerablemente su deuda.
Durante su participación en Aristegui En Vivo, Carrillo señaló que, aunque la deuda anunciada recientemente por el presidente es menor que la registrada en 2019 al inicio de su administración, el hecho de no haber logrado una reducción significativa después de recibir tal cantidad de apoyo es realmente preocupante para la empresa.
Explicó que alrededor del 30 por ciento (%) de la deuda total de Pemex, que asciende a 1.86 billones de pesos, debe ser pagada en un plazo de un año, lo cual representa un desafío considerable para la empresa petrolera. Además, destacó que la mitad de la deuda debe ser saldada para finales de 2027, según los datos del tercer trimestre que se actualizarán próximamente.
El pasado 21 de febrero, el presidente López Obrador informó que la deuda financiera de Pemex cerró preliminarmente en 106 mil 800 millones de dólares en 2023. En este contexto, Carrillo afirmó que durante este sexenio ha habido un menor crecimiento de los ingresos tributarios en comparación con administraciones anteriores, con un aumento del 6.7% durante el mandato actual, frente al 14% en el sexenio de Peña Nieto, el 20% en el de Calderón y el 45% en el de Fox.
El experto subrayó la importancia de que la deuda se utilice para financiar inversión y no gasto corriente, pero lamentó que durante el año pasado solo el 65% de cada peso se haya destinado a inversión. Destacó que la deuda debería generar crecimiento económico y aumentar los ingresos tributarios para poder pagarla.
Carrillo también señaló la importancia de garantizar recursos para educación y salud, advirtiendo sobre los problemas intergeneracionales que pueden surgir si se recortan estos rubros. En época electoral, enfatizó, es común que los candidatos prometan cosas sin explicar cómo se financiarán.