Agencias
EU.- Nueva York está expandiendo el toque de queda a más refugios para migrantes después de una serie de incidentes violentos atribuidos a residentes de estos centros, lo que ha llamado la atención en Estados Unidos en las últimas semanas. El gobierno del alcalde Eric Adams implementará un toque de queda de 11 p.m. a 6 a.m. en 20 centros de acogida para migrantes, afectando a unos 3 mil 600 migrantes, con el mayor refugio ubicado en Long Island City, Queens. Esta medida se suma a las restricciones previamente establecidas en cuatro refugios en respuesta a quejas vecinales.
Las restricciones buscan garantizar la seguridad y la gestión eficiente de los refugios, alineándose con las medidas ya aplicadas en albergues tradicionales para indigentes en Nueva York. La portavoz Kayla Mamelak enfatizó que estas acciones son parte del compromiso de la ciudad de priorizar la salud y seguridad tanto de los solicitantes de asilo bajo su cuidado como de los neoyorquinos que residen cerca de los refugios de emergencia. Estas medidas se producen en un contexto de creciente preocupación por la violencia y la delincuencia vinculada a los migrantes, que ha generado reacciones enérgicas por parte de las autoridades municipales y policiales.
La implementación de toques de queda adicionales surge después de incidentes como el tiroteo en Times Square protagonizado por un adolescente venezolano y una pelea entre migrantes y la policía en el mismo lugar el mes pasado. Estas medidas, que afectan a una fracción de los más de 200 centros de acogida gestionados por la ciudad para unos 66.000 solicitantes de asilo recién llegados, reflejan los esfuerzos de Nueva York por abordar los desafíos de seguridad en medio de la crisis humanitaria nacional.
