¡Giros inesperados en la carrera presidencial republicana! Este domingo, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció su retiro de las primarias para la nominación presidencial y sorprendió al dar su respaldo a la candidatura del exmandatario Donald Trump.
Con su retirada, la contienda republicana se reduce a dos destacados contendientes: el expresidente Trump y la exembajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley.
“No tenemos un camino claro para la victoria. Por eso, hoy suspendo mi campaña”, expresó DeSantis en un video compartido en redes sociales, a solo dos días de las primarias cruciales de Nuevo Hampshire.
En su mensaje, el gobernador afirmó que “está claro que la mayoría de los votantes republicanos desean darle una nueva oportunidad a Donald Trump”. A pesar de sus desacuerdos con Trump, DeSantis destacó que es una opción mucho mejor que el actual presidente, Joe Biden.
DeSantis arremetió contra Nikki Haley, considerándola representante del “corporativismo” y las concesiones ante la ideología ‘woke’ (progresista). El gobernador, representante del ala dura del partido, lanzó su candidatura en marzo pasado, siendo inicialmente visto como el único capaz de desafiar a Trump en las primarias.
A pesar de lograr el segundo puesto en los caucus de Iowa, sus resultados en las encuestas han disminuido en el último año, ubicándolo en el tercer lugar en las primarias clave de Nuevo Hampshire. La exembajadora Nikki Haley se esfuerza por posicionarse como una alternativa a Trump, intensificando su campaña en el estado del noreste del país.
Con Trump como el favorito indiscutible, la contienda republicana sigue siendo un escenario dinámico que captura la atención de la política estadounidense.