Mariana Gutiérrez
el buen tono
REGIÓN.- Justin es un niño migrante originario de Honduras. Tiene 11 años y tuvo que abandonar su país y dejar a sus hermanos y a su casa porque corría peligro por el grupo delictivo Mara Salvatrucha.
En entrevista, Justin aseguró que durante 57 días la comida no les ha faltado. Las personas mexicanas les han brindado tortillas y frijoles. Sin embargo, extraña los frijoles rojos de su natal país.
Justin viaja acompañado de su mamá, quienes juntos tuvieron que huir de su país porque el grupo delincuencial recluta a niños para convertirlos en delincuentes.
“Quería conocer México, pero no así, no en caravana. Pero jamás voy a olvidar las horas y días que he caminado”.
Por último, Justin sueña con ser chef y por eso quiere buscar el sueño americano para poder ayudar a su familia.