Sandra González
EL BUEN TONO
Orizaba.- Visiblemente cansadas, con rostros marcados por la desolación y la tristeza, un grupo diverso de mujeres llegó a Cuautlapan tras una travesía extenuante. Una de ellas, relató los sacrificios y dificultades que han marcado sus vidas en los últimos meses.
La mujer, que prefirió permanecer en el anonimato, compartió los desafíos de dejar atrás familiares, amigos e incluso hijos en busca de un futuro más prometedor. Dijo que la travesía se ha convertido en una odisea agotadora, con noches durmiendo donde pueden, enfrentando las inclemencias del clima.
“No nos permiten tomar transporte ni subir al tren; solo podemos avanzar a pie, migración nos baja”, expresó con un tono de frustración en sus palabras.