Laura A. García
El Buen Tono
Amatlán.- Vecinos de la colonia Quimiapa, donde se lleva a cabo la obra del drenaje sanitario, realizarán un rosario a las 20:00 horas durante las próximas nueve noches para los trabajadores que perdieron la vida en los aludes de barro, durante las próximas nueve noches, con la finalidad de que sus almas descansen en paz.
Siguen consternados, no dan crédito a lo ocurrido, los varones que alcanzaron a observar el accidente, que se disponían para ayudar y presenciaron el momento en el que un segundo alud de barro y piedras cayó sobre el operador de la retroexcavadora jumbo, dijeron que no pudieron dormir.
“Nos resultó imposible descansar, sentimos impotencia de que todo ocurrió tan rápido, y no hubo forma de rescatarlos inmediatamente”, expresaron.
En el lugar, el cirio que colocaron se consumió durante la noche, había veladoras de vaso encendidas y otras apagadas, una gorra que se presume era de uno de los trabajadores, así como dos cascos, uno en la zanja que tenía una profundidad de cinco metros, donde incluso la garra de la retroexcavadora está cubierta de barro, y el otro sobre la acera.
También están las vigas con las que Bomberos apuntaló para la recuperación de los cuerpos.
Coincidencias
En la intercepción del lugar de la tragedia, cada Semana Santa se lleva a cabo un encuentro, luego de que de la calle Aldama sale la Santa Verónica, de la segunda arteria de Allende, María Magdalena y del camino que viene de Altepezila, la Dolorosa, Madre de Jesús.
Lugareños dijeron que es una coincidencia que en ese lugar, el jueves 23 fallecieron e tres trabajadores, quienes se enfrentaron a varios contratiempos por avanzar, pues únicamente les faltaba el último tramo, unir la intercepción con el drenaje del camino rumbo a Altepezinal.
El sitio permanece paralizado, lo rodea una cinta roja de peligro; los vecinos esperan que ya no ocurra nada más.
