Puebla. – En la localidad de Esperanza, Puebla, próxima a la frontera con Veracruz, un problema crítico ha florecido, atrapando la atención de las autoridades locales: el desmantelamiento impune de vehículos robados, orquestado por la delincuencia organizada. Este fenómeno oscuro ha echado raíces en las peligrosas autopistas Puebla-Oaxaca y Puebla-Veracruz, convirtiéndose en una amenaza latente.
El equipo de investigación de “En Punto” se aventuró a abordar este problema, utilizando un dron para explorar un terreno señalado por un empresario transportista como el sitio donde desmantelaron uno de sus vehículos robados. Desde las alturas, se revelan terrenos con canales, aparentemente empleados por los criminales para estacionar tráileres, descargarlos y proceder con el desmantelamiento. La presencia de numerosos predios con estructuras similares en los alrededores sugiere una actividad delictiva extendida en la zona.
Esta situación no solo representa una amenaza seria para la seguridad de la región, sino también para la integridad de la red de transporte y sus trabajadores. Las autoridades locales enfrentan ahora un desafío apremiante para abordar este problema emergente y salvaguardar las vías de comunicación vitales que cruzan Esperanza. Sin embargo, parece que el grito de auxilio de la comunidad ha caído en oídos sordos, ya que la delincuencia continúa su actividad desenfrenada.
Y aunque la Guardia Nacional habia reportado en meses anteriores el uso de Drones para evitar que delincuentes siguieran robando, este mal parece no tener fin.
A lo que lleva a cuestionarnos, será que de verdad:”No ven? Si todo el pueblo sabe dónde desmantelan los vehículos robados. Y hasta con grúa los jalan cuando ya los desvalijaron todos, y los traen por todo el pueblo.
Dónde quedaron los Drones?
O será que los policías son cómplices?
