AGENCIA
Acapulco.- Familiares de los tripulantes de las embarcaciones naufragadas durante el huracán Otis han levantado voces de indignación, acusando al Gobierno de desinterés y prohibición para participar en las labores de búsqueda, así como de ocultar información crucial.
Un sobreviviente y capitán de 55 años, Rafael Pérez, lanzó una advertencia a los dueños de los barcos, instándolos a que se presenten o enfrenten la divulgación pública de sus datos personales. Pérez enfatizó que están dispuestos a señalar a aquellos que no han mostrado apoyo a las familias afectadas.
Este miércoles, se llevó a cabo una misa en La Marina, donde se congregaron cerca de 80 familiares, amigos y compañeros de los tripulantes desaparecidos. Pancartas con mensajes como “Exigimos búsqueda por parte del Gobierno” y nombres de los desaparecidos fueron exhibidas, evidenciando la frustración de los familiares.
El párroco de Bajos del Ejido, Mario Palma, dirigió la misa, compartiendo el dolor de las esposas y madres de los desaparecidos. El presbítero mencionó la impotencia de aquellos que presenciaron la pérdida de sus seres queridos durante el huracán de categoría 5.
Susana Ramos Villa, de 35 años, esposa de Rubén Torres Campos, capitán del barco Sereno, expresó su agradecimiento al propietario del barco por facilitar una embarcación para buscar a los tripulantes. Narró la historia del marinero Ricardo, quien sobrevivió al naufragio al aventarse al mar cerca de la isla Roqueta.
En medio de lágrimas, Ramos Villa exigió la unidad y acción: “El Gobierno no los está buscando, el Gobierno solamente quiere levantar Acapulco para que en diciembre tengan ganancias, ¿y nosotros? ¿Y nuestros hijos? ¿Nuestros esposos, dónde quedan? Olvidados en el mar. Exigir, hacer un plantón, cerrar calles, algo para que nos escuchen, que sepan que estamos buscando a alguien”.
Otras madres, como Maricela Cipriano, también criticaron la falta de apoyo gubernamental, señalando que las autoridades se centran en la limpieza de la avenida Costera, descuidando la búsqueda de los desaparecidos.
El capitán sobreviviente, Rafael Pérez, subrayó la importancia de que los patrones den la cara y respondan por sus tripulaciones. Pidió que sientan vergüenza si la sociedad los señala y destacó la solidaridad y apoyo de la comunidad.
Al concluir la misa, los familiares arrojaron flores blancas al mar entre los escombros, simbolizando la esperanza de encontrar a sus seres queridos. Las demandas de justicia y acciones contundentes persisten mientras la comunidad afectada busca respuestas y apoyo en medio de la tragedia.