AGENCIA
Jan Yunis.- En un violento giro de los acontecimientos, las fuerzas israelíes llevaron a cabo un asalto al hospital de Shifa en Gaza en la madrugada del miércoles. Este hospital, que ha sido un símbolo del sufrimiento de los civiles palestinos, alberga a cientos de pacientes, incluidos recién nacidos, que ahora se encuentran atrapados con suministros cada vez más escasos y sin electricidad.
Según Mohammed Zaqout, director de los hospitales de Gaza, tanques israelíes ingresaron al complejo y soldados entraron en edificios, incluyendo áreas críticas como los departamentos de urgencia y cirugía, que cuentan con unidades de cuidados intensivos. La situación es aterradora, con pacientes, incluyendo niños, gritando de terror. El hospital de Shifa se ha convertido en el epicentro de las acusaciones cruzadas sobre la responsabilidad de las numerosas muertes y la destrucción masiva en Gaza.
Israel afirma que Hamás utiliza a civiles como escudos humanos y tiene un centro de mando dentro y debajo del hospital, pero no ha proporcionado evidencia visual de estas afirmaciones. Hamás y el personal del hospital niegan estas acusaciones. Previamente, Estados Unidos afirmó que su inteligencia sugería el uso de Shifa y otros hospitales por parte de Hamás y los túneles debajo de ellos para respaldar operaciones insurgentes y retener a los cautivos.
El ejército israelí declaró que la operación en Shifa era precisa y selectiva, y que buscaban a rehenes. Las fuerzas llevaron consigo suministros médicos, alimentos para bebés, incubadoras y otros materiales. Sin embargo, las tensiones aumentan a medida que la población civil enfrenta condiciones cada vez más desesperadas.
El conflicto ha dejado más de 11 mil 200 muertos en Gaza, y dos tercios de la población han huido de sus hogares debido a los bombardeos israelíes. Las instalaciones de almacenamiento de combustible de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) en Gaza están vacías, lo que pone fin a las operaciones de ayuda, incluido el suministro limitado de alimentos y medicinas para más de 600 mil personas refugiadas.
Las autoridades israelíes cambiaron su decisión inicial y permitirán la entrada de combustible para operaciones humanitarias en respuesta a una solicitud de Estados Unidos. El hospital de Shifa y la situación humanitaria en Gaza siguen siendo puntos críticos en medio de un conflicto que ha dejado a la población civil atrapada en el fuego cruzado.