AGENCIA
Nacional.- Un juez en materia administrativa con sede en la Ciudad de México ha tomado la decisión de dejar sin efecto las restricciones vehiculares que actualmente rigen en las carreteras que conducen al estado de Guerrero. Esta medida se toma con el propósito de permitir la entrega de asistencia humanitaria a las personas afectadas por el reciente paso del huracán “Otis”.
La acción legal fue resultado de una suspensión de plano otorgada a Abraham Moisés Cano Díaz, quien presentó una demanda de amparo el viernes 27 de octubre. La demanda de amparo se dirigió contra los actos del presidente Andrés López Obrador, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Marina y el gobierno del estado de Guerrero, ya que reabrieron la circulación en la autopista del Sol, pero limitaron el acceso solo a vehículos oficiales.
Los actos impugnados incluyeron la prohibición de transitar libremente por el estado de Guerrero y la restricción de la recopilación, transporte y entrega de bienes muebles, alimentos, servicios y ayuda humanitaria por parte de civiles a las personas damnificadas por el huracán “Otis”.
En la demanda se solicitó la suspensión con el propósito de permitir a Abraham Moisés Cano Díaz transitar, trasladar y entregar víveres y ayuda humanitaria sin restricciones. Se alegó que elementos de la Guardia Nacional, la Marina y otras autoridades estaban impidiendo el paso de vehículos y personas civiles con ayuda humanitaria.
En su resolución, el juez argumentó que la Organización de las Naciones Unidas ha indicado que los Estados afectados están obligados a no rechazar de manera arbitraria e injustificada una oferta de buena fe cuya intención sea exclusivamente proporcionar asistencia humanitaria, ni denegar el acceso a las víctimas.
Como resultado de esta resolución, el demandante podrá ingresar personalmente para entregar ayuda humanitaria a las personas afectadas por el huracán “Otis” en el estado de Guerrero, lo que representa un paso importante para garantizar que la asistencia llegue a quienes más la necesitan en este momento de crisis.
Bien lo decía nuestro Siervo de la Nación: “que todo el que se queje con justicia tenga un tribunal que lo escuche, lo ampare y lo proteja contra el fuerte y el arbitrario”.
¿Hasta dónde hemos llegado? Acapulco devastado, los ciudadanos queriendo ayudar y en vez de estar ya apoyando, hay que preocuparse por llevar un amparo para poder hacerlo, no cabe duda que este gobierno es lo peor que le pudo pasar a México?
Tengan presente las acciones del gobierno para monopolizar la ayuda a los damnificados y el festejo en Chilpancingo por su segundo informe, acuérdense de esto al momento de estar en las urnas el año próximo, no se puede ser tan miserable.
Es una tristeza tener que recurrir a un amparo para poder ayudar a la gente, ¡este gobierno de Morena es una desgracia para México!