De la Redacción
el buen tono
Fortín.- Hasta diciembre está programada la controvertida demolición de la caseta de Fortín, anunciada por el director jurídico de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), José Luis Palomares Mora.
Aunque la noticia es bienvenida por muchos habitantes y sectores de la región que han clamado durante más de tres décadas por su eliminación, cuestionan el por qué no se empieza de inmediato.
El procedimiento de adjudicación de la obra está programado para el 27 de octubre, con la demolición planeada para diciembre. El argumento principal detrás de la demolición es la prevención de accidentes, un problema que ha afectado a los automovilistas en fechas recientes. Aunque los percances hasta ahora han sido menores, es vital garantizar la seguridad de los usuarios de la carretera.
Sin embargo, la decisión de llevar a cabo esta obra en diciembre, ha generado inquietudes significativas, debido a que diciembre es un mes de gran tráfico por la temporada navideña, y esto plantea la pregunta de por qué no se aprovecha el actual periodo de congestión vial causado por las reparaciones del puente, para avanzar con la demolición de la caseta. Esto podría reducir aún más la molestia de los conductores y minimizar el impacto en el flujo de tráfico.
Además, surge la interrogante sobre la falta de medidas adecuadas para controlar el tráfico en la zona de aproximación durante la demolición. La sugerencia de pedir la asistencia de la Guardia Nacional para supervisar la situación y prevenir accidentes parece lógica, pero es necesario preguntarse si las autoridades realmente están tomando la seguridad de los ciudadanos en serio.
