La presentación de supuestos cuerpos ‘extraterrestres’ en Ciudad de México, primero ante legisladores en la sede del Congreso y luego frente a periodistas, ha desatado una amplia gama de comentarios, incluyendo burlas y desacreditaciones.
Voces científicas han calificado directamente a los supuestos cuerpos de “seres no humanos” como un fraude. El periodista y ufólogo mexicano José Jaime Maussan Maussan fue el maestro de ceremonias en ambas presentaciones, sosteniendo que los cuerpos “desecados” fueron encontrados en Perú en 2017 y calificándolos como “seres no humanos que no son parte de nuestra evolución terrestre”. Estas figuras tenían el tamaño del esqueleto de un niño.
Sin embargo, el hallazgo fue cuestionado desde su origen, ya que los supuestos cuerpos nunca fueron presentados físicamente en Perú, y la Fiscalía peruana concluyó que eran “muñecos manufacturados” cubiertos con una mezcla de papel y pegamento sintético para simular piel. También se determinó que no eran restos de seres ancestrales extraterrestres.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha reaccionado con escepticismo ante la situación, y Julieta Fierro, investigadora del Instituto de Astronomía de la UNAM, expresó su desconfianza, señalando que el asunto “no tiene ni pies ni cabeza”.
El legislador que organizó la sesión en el Congreso, Sergio Gutiérrez Luna, aclaró que la Cámara ni avala ni niega las tesis planteadas y que solo pretende escuchar “todas las voces” debido a la relevancia del tema.
Esta presentación en el Congreso mexicano tuvo lugar después de una sesión similar en Estados Unidos que generó controversia y testimonios de expertos de varios países.
Mientras que el estudio de objetos voladores misteriosos a menudo evoca conversaciones sobre extraterrestres, en Estados Unidos legisladores de ambos partidos han presionado en los últimos años para realizar más investigaciones debido a la preocupación de que los avistamientos de objetos inusuales estén relacionados con adversarios de Washington.
En México, expertos en aviación también han hablado de prestar más atención a fenómenos anómalos en el espacio aéreo por razones de seguridad.
