Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- “Cuando yo veía pasar al tren a lo lejos, yo decía, cómo no voy y me tiro a las vías y ya dejo de existir”, así relata Miguel Ángel, quien después de más de 25 años de recibir ayuda, logró manejar su depresión y frenar sus ideas suicidas.
El próximo domingo se conmemorará el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, sin embargo, para Miguel Ángel, quien es militante del Movimiento de Buena Voluntad de Neuróticos Anónimos, este esfuerzo ha sido de toda su vida.
De vivir abusos de todo tipo en su infancia, violencia intrafamiliar, a sus 25 años la depresión fue más fuerte que lo alejó del deporte, su círculo social, al punto de tener ideas constantes de quitarse la vida.
“Antes de conocer a Neuróticos Anónimos yo iba a misas de sanación y a veces pasaba un tiempo afuera esperando en algún campo esperando esas misas y veía que el tren pasaba a lo lejos y decía: cómo no voy a ahí y me tiro a las vías del tren y ya dejo de existir y acabo con todo lo que estoy pasando’’.
Hace 25 años ingresó al Movimiento de Buena Voluntad de Neuróticos Anónimos, desde entonces ha enfrentado y sabido gestionar mejor sus emociones y llevar una vida estable.
Hoy, a sus 51 años, expresa que ha podido relacionarse con más gente e incluso hace pocos años pudo terminar una carrera, por lo que hoy es un profesionista.
“Experimenté la angustia que es estar en un lugar en el trabajo y sentir un nudo en la garganta e ir al baño y dejar que se me pasara y volver a regresar a mi área de trabajo, entonces eso ya no lo he sentido gracias a haber encontrado este lugar en donde puedo expresarme’’, finalizó.