La Marina Armada de México ha anunciado sus planes para expandir la zona en la que coloca bloques de hormigón con ganchos de acero en el lecho marino con el objetivo de atrapar las redes agalleras que amenazan a la vaquita marina, el mamífero marino más amenazado del mundo. Esta medida, que comenzó el año pasado en el Golfo de California, busca proteger a esta especie que solo habita en esta región y cuenta con una población de aproximadamente 10 ejemplares.
Las vaquitas marinas se encuentran en peligro debido a las redes agalleras utilizadas en la pesca de totoaba, un pez cuya vejiga natatoria es altamente valorada en China. Estas redes atrapan a las vaquitas, lo que ha llevado a su muerte en numerosos casos. Los bloques de concreto, equipados con ganchos, tienen como objetivo atrapar y dañar estas costosas redes, disuadiendo a los pescadores ilegales de operar en la “zona de tolerancia cero”, que se considera el último refugio de las vaquitas y donde se implementan patrullajes intensivos para su protección.
Sin embargo, recientes avistamientos de vaquitas han revelado que la mayoría de ellos ocurrieron en la periferia e incluso fuera de los límites de la zona de “tolerancia cero”. En respuesta a esto, la Marina planea negociar con la comunidad pesquera de San Felipe, en el estado de Baja California, para extender la ubicación de los bloques de hormigón y así ampliar la protección de esta especie en peligro crítico de extinción.