Efraín Hernández
el buen tono
Córdoba.- En el marco del Día del Peluquero, que se celebra cada 25 de agosto, es importante destacar a aquellos profesionales que con tijeras, capas y navajas transforman cabellos en obras de arte. Miguel Vichique Hernández, de 36 años, es uno de esos apasionados peluqueros que ha dedicado más de 18 años de su vida a este noble oficio. Su historia es un testimonio de cómo una pasión temprana puede convertirse en una carrera gratificante y llena de creatividad.
Desde los 15 años de edad, Miguel mostró un interés inusual por la peluquería. Lo que comenzó como un juego con tijeras de papel en la infancia, rápidamente se convirtió en una fascinación genuina por el arte de transformar el cabello. A medida que crecía, su determinación por aprender y perfeccionar las técnicas de corte y estilo era evidente.
“Mi abuelo, papá, tío, primos son peluqueros ya es algo que tenemos en la sangre y cada generación vamos dejando ese legado”, afirmó con una sonrisa.
Esta fecha se originó en el siglo XVII, cuando la profesión de peluquero era ejercida únicamente por plebeyos de sexo masculino. Su labor principal consistía en el mantenimiento y cuidado del cabello de las pelucas utilizadas por la nobleza.
Se eligió el día 25 de agosto para esta celebración, debido a la Santificación de Luis IX, Rey de Francia por parte de la Iglesia Católica.
