Una espantosa tragedia ha sacudido al departamento de Intibucá, en el occidente de Honduras, donde un hombre y sus tres hijos, de 9, 11 y 19 años, perdieron la vida en un acto de violencia sin precedentes. Según informes de la Policía Nacional y familiares, las víctimas fueron asesinadas a tiros y luego quemadas en el municipio de Yamaranguila.
El hombre, identificado como Gilberto Bautista, junto con sus hijos Eduardo Josué, Allan Fernando y Erlin Santiago Bautista, se encontraban recogiendo madera de ocote cerca de su residencia en la aldea Oloas. Fue en este momento cuando un individuo, identificado como Selvin Sánchez, supuestamente los atacó con una pistola y luego incendió el lugar.
María Gómez, esposa y madre de las víctimas, ha responsabilizado de este atroz acto a una tía de Gilberto Bautista, aunque no proporcionó su nombre. Según Gómez, el motivo detrás de este brutal asesinato podría estar relacionado con una disputa por tierras.
Este incidente es un recordatorio sombrío de la violencia que prevalece en Honduras, un país que enfrenta algunos de los índices más altos de violencia en el mundo, a pesar de no estar en guerra. Según fuentes oficiales, se registran entre diez y quince asesinatos diarios en el país.
La comunidad local está consternada por esta tragedia y clama por justicia para las víctimas y sus familiares. Las autoridades están llevando a cabo una investigación para esclarecer los detalles de este acto horrendo y llevar a los responsables ante la justicia.
