Segunda de
tres partes
Laura A. García
El Buen Tono
Yanga.- Los padres de Fidel, Isabel Ramírez Zavaleta y Fidel González Cortés, siguen con su relato en torno al asesinato de su hijo. En esta parte se refieren a la investigación,
“No podemos decir cómo va la investigación, porque no tenemos nada aún, hemos ido y declarado, la Policía ha ido a investigar, lo único que sabemos es que supuestamente de alguna forma fue a declarar Michel, me imagino que, protegida, porque a estas alturas se fue del país. Estamos con la firme decisión de pedir justicia, los avances”, dijeron.
A una semana de que asesinaron a su hijo carecen de una copia que les dé avances o si se trabaja el asunto. Así también, manifestaron que la Fiscalía recogió los videos de las cámaras de seguridad de su vivienda y de vecinos. Presentaron evidencia, pero no les dan información.
El “amigo”
Víctor Lara era amigo de Fidel desde hacía años, lo tenían como un niño huérfano, que vivía con la abuelita, era un hijo más como todos los amigos de Fidel para su mamá, “hace unos días fue a mi casa, iba tomado, tenían llaves, pero se las recogí”.
Ahora no confía en las autoridades, “le dije al Fiscal Regional no confío, y a mí todo mundo me dice que desconfíe, voy a esperar, tampoco le daré mucho tiempo a la Fiscalía, serán uno o dos días, porque familias de esas mismas personas me dan apoyo”.
Fidel
Su hijo, dijeron, era un joven de 27 años, quien gustaba de la batería, acababa de terminar la licenciatura en Derecho, estaba viendo lo de su título, “le prometí una fiesta. En la copiadora se quedó su solicitud para ingresar sus documentos al Seguro Social, donde hacía trámites para laborar desde el año pasado.
Lo buscaron de padrino de una escuela y los niños fueron a despedirlo, “para mí, mi hijo era mi luz, una estrella que siempre acusaba con su papá, pero era el consentido, se volvió el chiquito, el que estaba en casa, nuestra única compañía, porque sus hermanos ya se casaron. Él era un chico al que todo le daba risa, me aventaba un beso, me cerraba un ojo cuando estaba enojada”, puntualizó su mamá.
“Aun cuando cursaba la universidad era un chico de casa, iba por él a la universidad, pagaba su escuela, es injusto que venga un delincuente y quede impune”, expresó.
La familia González Ramírez pide “justicia, la detención de los infractores, que no queden impunes”.