Efraín Hernández
el buen tono
CÓRDOBA.- En un emotivo y significativo encuentro, la Catedral Inmaculada Concepción fue el escenario en el que se congregaron todos los párrocos de la Diócesis de Córdoba, junto con el obispo emérito Eduardo Patiño Leal, diversas religiosas y un grupo de seminaristas. Se reunieron para celebrar las cuatro décadas de entrega en el Ministerio Sacerdotal del obispo Eduardo Carmona Ortega.
En una misa donde la catedral estuvo muy concurrida, fieles de todas partes se congregaron la tarde de ayer para conmemorar el cuadragésimo aniversario de la ordenación sacerdotal de monseñor Carmona. Durante la ceremonia, el ministro recordó que un 20 de agosto de 1983 quedó marcado en su vida cuando fue ordenado como sacerdote en la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México.
“Fui ordenado sacerdote el 20 de agosto de 1983, Año Santo de la Redención, en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe. Ustedes no lo saben, pero soy originario de la Ciudad de México y el sentimiento guadalupano ha impregnado toda mi vida”, dijo el prelado.
Durante la eucaristía invitó a sus hermanos sacerdotes para que vivan su vocación con amor y humildad, siempre agradecidos a Dios. “El sacerdocio ofrece la felicidad de ser muy feliz a través de encontrarle sentido a la vida al entregarse a los demás en todo momento”, concluyó el segundo obispo de Córdoba.
