Veracruz.- Ha pasado más de un mes de la desaparición de Isabel Ortiz Ortega sin que hasta el momento las autoridades veracruzanas muestren algún avance sobre el caso que está denunciado en la Agencia del Ministerio Público.
Familiares de la víctima, indicaron que pese a que el gobierno de Veracruz prometió todo el apoyo, no han hecho nada.
Comentaron que la condición para seguir las investigaciones, fue “guardar silencio, mantenerse al margen de publicaciones en las redes sociales. No protestas ni andar pegando papeles con su cara en los sitios públicos”, dijo un familiar quien pidió el anonimato.
Lo peor es que la familia ha hecho todo lo que ha pedido la autoridad, pero “hasta ahora no tienen ningún avance en el caso.
Siempre nos dicen ‘estamos investigando, nosotros le llamaremos’, dijo.
Pese a que la misma familia ha hecho investigaciones, y aportó datos concretos de dos presuntos sospechosos, “no quieren mandarlos a llamar ni los detienen. Siempre que declaran, es por medio de sus abogados. No entendemos porque es así la autoridad. Ya no queremos más gente mediocre”, comentó el entrevistado.
En base a la investigación ministerial 764/2014 de la agencia citada, Isabel Ortiz Ortega desapareció el pasado 21 de julio en el puerto de Veracruz. Su familia le vio por última vez cuando salía del fraccionamiento Los Torrentes, en la zona norte del puerto.
Desde entonces, no se tiene noticias de ella. La familia comenzó la búsqueda de pistas, y dieron con dos sujetos que presuntamente tienen ligas directas con la desaparición y que hasta la fecha no son buscados por las autoridades pues el caso se ha manejado en medio del hermetismo.
La familia de la víctima es originaria del vecino estado de Oaxaca y comentan que es muy complicado y desgastante viajar a Veracruz para buscar a las autoridades y encontrar conque no hay avances. Y lo peor, irse dando cuenta de que son docenas, cientos, los desaparecidos en la zona y por quienes se hace poco.
“Ya estamos desesperados, ya nos sabemos que hacer, queremos que ella aparezca con bien pues era una persona que no le hacía mal a nadie. Se dedicaba a la venta de productos de belleza y a hacer mucho ejercicio en el gimnasio. No entendemos lo que pasó”, dijo la fuente consultada.
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