Australia.- Michael Phelps ayudó al equipo estadounidense a ganar la carrera de 4×200 libre tras una titánica carrera contra Japón en una lluviosa noche de invierno en Australia.
Para un hombre que tiene 18 medallas de oro olímpicas podría haber sido otro día más, pero no esta vez.
La importancia no pasó desapercibida para Phelps, quien competía en su primera presentación internacional en dos años en un evento que los estadounidenses han ganado por más de una década.
“Creo que poder mantener esa tradición y poder volver al podio, se siente maravilloso”, dijo Phelps a reporteros.
Phelps no solo ganó el oro en relevos sino que también terminó en un excelente cuarto lugar en la final de los 100 metros libres, un evento en el que rara vez compitió incluso en su mejor momento.
Su tiempo de 48.51 segundos fue exactamente un segundo por debajo de su mejor marca en esa competencia, pero fue la mejor señal hasta ahora de que está en camino de volver a brillar cuando participe en losJuegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Aún en las primeras etapas de su regreso tras su retiro después de Londres 2012, Phelps debió retirarse el jueves de los 200 metros estilo libre y de los 100 metros espalda.
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