La niña de ocho años que sobrevivió a la masacre del balneario La Palma, en Guanajuato, contó a sus familiares la manera en que fueron asesinados cinco integrantes de su familia -sus padres Lidia y Francisco, el hermano de 7 años y dos tíos- el pasado 15 de abril.
“El pequeño, estaba estudiando, iba a cumplir 8 años, era un niño sano, inquieto, simpático; la hermanita, tú platicas con ella y, yo cuando la vi, la abracé y le digo: ‘qué onda, cómo estás mi niña’, porque me habían dicho que no sabía nada”, apuntó un tío de la menor a Milenio.
“Me dijo ‘estábamos en unas albercas, pero llegaron unos rateros y le dieron unos balazos a mi mamá, a mi hermano, a mi papá y a mis dos tíos’. Ay mi reina y tú cómo estás, ‘bien’. La niña obviamente no tiene conocimiento, no entiende nada ahorita”, agregó el familiar.
Los asesinatos en el balneario de Cortazar dejaron mucho temor entre la población: “aquí en Guanajuato, no puedes, ves estatales y te da miedo si te paran, ves municipales y no quieres ni que te volteen a ver, ¿Por qué? Por lo que todo mundo sabemos y nadie quiere decirlo, por miedo a represalias o a cualquier cosa, sabemos que trabajan para la delincuencia de aquí, sabemos que son los que reportan, son los que llevan y traen, pero no pasa nada”.