Bagdad.- El presidente de Irak eligió a un político chiita veterano para dirigir el gobierno de Irak, preparando así el escenario para un enfrentamiento político en un país que ya está luchando para contener a una organización extremista islamista.
El actual primer ministro, Nouri Al-Maliki, utilizó los canales legales para argumentar que el nombramiento de Haider Al-Abadi, de 62 años, quien ha sido convocado para formar un nuevo gobierno, no es válido.
Durante sus ocho años en el poder, Al-Maliki ha centralizado el poder en su persona, en un estilo dictatorial que ha erosionado su apoyo entre compañeros chiitas y sunitas por igual. Él es ampliamente culpado por un entorno que permitió a los extremistas sunitas del Estado Islámico tomar el control de una gran parte de Irak.
El presidente de Irak nombró al prominente político chiita Haider Al-Abadi como nuevo primer ministro del país, desplazando al titular Nouri Al-Maliki, después de ocho años en el cargo.
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