Córdoba.- A pesar de que los floristas ubicados a un costado del Mercado La Isla, se han mantenido a la espera de que el alcalde Francisco Portilla Bonilla implemente un espacio digno para su re ubicación, éstos aseguran haber perdido la esperanza de que ese día llegue.
Al parecer, para el Ayuntamiento cordobés, este sector de comerciantes se encuentra en el olvido, y aún cuando de manera urgente, éstos le han solicitado su instalación en un sitio digno que les permita abrigarse de las lluvias, el frío y los intensos calores, éstos continúan siendo ignorados.
Inclusive existen algunos que aseguran han sido amenazados con atentar en contra de sus familias, de seguir “levantando polvo” en el tema.
Tal situación -aseguran los comerciantes de flores- los ha orillado a preferir dejar por la paz su reubicación, luego que después de insistir demasiado, terminaran siendo intimidados por personal del Ayuntamiento cordobés.
Al respecto, uno de los entrevistados quien prefirió mantenerse en el anonimato, indicó que Portilla Bonilla ya no les hace caso, “siendo que actualmente está más interesado en ver qué es lo que se va a llevar que en cumplir sus promesas”.
Agregó que hasta este día, el Alcalde no ha cumplido con ninguno de los acuerdos realizados para este grupo de comerciantes, mucho menos con la mejora de sus actuales condiciones de trabajo.
En este sentido, el entrevistado resaltó que ya ni siquiera cuentan con líderes que los representen, siendo que éstos también han sido ignorados por el Gobierno municipal, y por el área de Comercio, donde han solicitado en reiteradas ocasiones que se regularice a los floristas que aún se encuentran en el mercado Revolución, y que se mantienen en el lugar por ofrecer pagos discrecionales a los inspectores de esta área.
Refirió que esta situación es del conocimiento de su director Jorge Vélez, el cual poco ha hecho para solucionar el conflicto.
Cabe resaltar que los comerciantes de flores de La Isla, han manifestado en diversas ocasiones su necesidad por contar con un espacio digno para realizar sus ventas, así como que se regularice al comercio ambulante, el cual afecta directamente sus ingresos, tras convertirse en una competencia desleal.
Yessica Martínez
El Buen Tono