Efraín Hernández
El Buen Tono
CÓRDOBA.- Dentro de esas miles de historias que se cuentan en esta ciudad, está la del señor Bernardo, quien lleva años trabajando al noble oficio de franelero.
A pesar de que trabaja apartando lugares en la calle para que los automovilistas se estacionen, el famoso “viene viene» poco le da para sacar unas monedas y así poder comer.
Sin embargo, a pesar de ser un hombre de edad avanzada, sobrio, de pocas palabras, -quien no quiso dar muchos detalles de su vida-, trabaja día a día para poder comer, su tenacidad es admirada por los mismos vecinos que lo conocen como “Don Berna” señalan que vive en un cuarto, el cual le dieron unas almas caritativas para que pueda pasar la noche.
“Mira, te puedo decir que no tiene familia, lleva muchos años trabajando como franelero, actualmente cuida un corredor donde están unas oficinas”, agregó un vecino.
Otros comentan que para la Nochebuena, como el Año Nuevo, es un día común y corriente, “Siempre le llevamos un plato para que coma, ya sea de pavo o de pierna”, explicó el propietario de un negocio el cual se ubica donde Don Bernardo vigila.