AGENCIA
Qatar.- El mundial que comenzó el 20 de noviembre en Qatar no será uno más. Esto debido a su ubicación geográfica y sus condiciones climáticas, que obligaron a modificar las fechas, a su forma de Gobierno una monarquía absoluta y a su religión de Estado el islám. Pero hay otra característica de este país ubicado en una pequeña península sobre el Golfo Pérsico que lo hace único: su enorme riqueza.
Según un listado elaborado este año por Global Finance que se basa en el PIB per cápita, Qatar es el cuarto país más rico del mundo, con US$ 112.789 por habitante, apenas detrás de Luxemburgo, Singapur e Irlanda. Con pequeñas variaciones, lo cierto este pequeño emirato ha estado entre los diez más ricos durante al menos durante toda la última década.
La prosperidad económica de Qatar es producto de la extracción y exportación de petróleo, descubierto en 1939 y producido por primera vez en 1949, y del gas natural según un informe del Banco Mundial, el país posee las mayores reservas del mundo.
Así, la riqueza del pequeño país es un dato de apenas el último medio siglo. Antes de la Segunda Guerra Mundial, la población de Qatar se dedicaba a la extracción de perlas, a la pesca y a las actividades comerciales y, en tanto colonia británica, era una de las más pobres del mundo. En la actualidad, esas actividades son prácticamente inexistentes.