Chocamán.- A pesar del malestar que causa en la población el basurero municipal, considerado un foco de infección, el Ayuntamiento asegura no contar con recursos para su reubicación.
El tiradero se localiza en la comunidad de Cruz Blanca, y es propiedad de un particular, quien no cobra porque los desechos sean depositados en el mismo.
El asistente del regidor Primero, y encargado del Departamento de Limpia Pública, Nilo Pablo Martínez Nolasco, comentó que este problema aqueja al municipio desde hace 15 años, por lo que en coordinación con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), se realiza la construcción de un muro de contención para evitar la contaminación de un río que corre junto al tiradero, además de monitorear constantemente la calidad del agua.
Señaló que una opción para depositar sus desechos sería el basurero de Cuitláhuac; sin embargo, esto les generaría fuertes gastos al Ayuntamiento.
Otro problema, aseguró, es la escasa cultura de la ciudadanía para pagar por el servicio, ya que, según dijo, donde más se recaudan fondos es en la cabecera municipal. Ahí, la participación de los habitantes no supera el 70 por ciento, y lo que se obtiene es insuficiente para costear el traslado de la basura a otros municipios.
“En promedio por camión serían unos 3 mil 500 pesos, y son dos unidades. Estamos hablando de unos 7 mil pesos, incluyendo costos de combustible; en los mejores días, se llegan a recaudar cerca de $2 mil, y lo demás tendría que subsidiarlo el Ayuntamiento”.
Ante ello, consideró más viable dar mantenimiento al basurero de Cruz Blanca y empezar a bajar proyectos de reciclaje para aprovechar los desechos del lugar y beneficiar a los habitantes de esta comunidad.
Irvin Marcel
El Buen Tono
