Ginebra.- La alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Navi Pillay, demandó una investigación “rápida, completa, efectiva e independiente” sobre el derribo del avión de Malaysia Airlines el pasado 17 de julio en el que murieron sus 298 ocupantes, porque puede constituir un “crimen de guerra”.
Desde Ginebra, la funcionaria afirmó que el derribo de la aeronave en el este de Ucrania, cerca de la frontera con Rusia, fue una violación al derecho internacional y, dadas las circunstancias, “puede ser un crimen de guerra”.
“Es imperativa una investigación rápida, completa, efectiva e independiente sobre este hecho”, subrayó Navy, al tiempo que se dio a conocer el más reciente informe de la misión de observadores enviada por su oficina a Ucrania.
Y es que existen denuncias de que las milicias que controlan la zona en donde ocurrió el accidente no permiten acceso irrestricto a los investigadores.
En el avión siniestrado cerca de la frontera con Rusia viajaban 298 personas, 15 de ellas miembros de la tripulación. De ese total, 80 eran niños y 23 ciudadanos de Estados Unidos.
El avión volaba de Ámsterdam a Kuala Lumpur y cayó en Torez, a unos 40 kilómetros de la frontera con Rusia.
La funcionaria de la ONU exigió que toda persona que cometa graves violaciones del derecho internacional como crímenes de guerra sea llevada ante la justicia, sin importar quién sea.
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