Efraín Hernández
El buen tono
Córdoba.- La Marcha Nacional por la Vida, la Mujer y la Paz logró concentrar a miles de ciudadanos de municipios como Córdoba, Naranjal, Huatusco, Amatlán, Ixhuatlán del Café, Zentla, entre otros, los cuales atendieron a la convocatoria de la Diócesis de Córdoba y la agrupación Ola Celeste.
En dicha marcha, la cual comenzó en la avenida 3 y dio la vuelta por las principales calles de la ciudad, contó con la presencia de adultos, jóvenes y niños, quienes participaron de manera entusiasta portando cartulinas y mantas a favor de la vida, especialmente.
Cabe señalar que esta movilización se realizó de manera simultánea en más de 100 ciudades del país, donde la sociedad civil alzó la voz en un mismo clamor para pedir un alto a la violencia que se vive en el país, situación que afecta principalmente a las mujeres.
Con lonas y carteles se podían apreciar mensajes donde pedían por el respeto a la vida, desde su concepción y hasta su muerte natural.
“Estamos aquí porque queremos la paz y queremos volver a confiar, rechazamos la violencia en las calles, en las familias y en los medios de comunicación, rechazamos también que haya leyes y sentencias judiciales que confronten a la madre embarazada y a su hijo”, explicó María Cristina Contreras Meneses, integrante del movimiento Ola Celeste.
Por su parte, el obispo de la Diócesis de Córdoba, Eduardo Carmona Ortega, mencionó sentirse satisfecho por la respuesta que hubo en la marcha.
“Estamos satisfechos por la conciencia que tiene la gente, por el respeto a la vida, sobre la dignidad de la mujer, así como la necesidad que tememos por la paz”, agregó el prelado.
Monseñor Carmona subrayó que la marcha tuvo tres principales objetivos: “el primero que termine el aborto, el segundo que se defienda la vida en todos sus aspectos, desde la concepción hasta la muerte natural y el tercero la dignidad de la mujer”.
El prelado mostró su felicidad por la convocatoria que hubo no solamente en Córdoba, sino a nivel nacional, “son expresiones que nos dice cuál es la cultura y la mentalidad de nuestro pueblo mexicano, respeto a la vida, mujer, queremos la paz, por tanto, no a la violencia, no al aborto, no a faltarle el respeto a las mujeres.”
