De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Una trifulca entre porras en el estadio Rafael Murillo Vidal, causó la movilización de la Policía Municipal, quienes fueron alertados a través del número de emergencias 911.
La tarde de ayer un juego de fútbol de la categoría juvenil terminó en un conato de bronca entre ambas porras, y es que de acuerdo a datos obtenidos cerca del minuto 10 del segundo tiempo, cuando se disputada el partido entre las escuadras Juniors vs. Wolfs uno de los futbolistas hizo una jugada que provocó los ánimos se calentaran entre ambas escuadras y terminara en golpes.
La situación causó tensión entre los aficionados, quienes invadieron el terreno de juego para golpear a los jugadores, fue ahí cuando padres de familia del equipo agredido saltaron a la cancha para defender a sus hijos; el encuentro fue suspendido por el árbitro.
METE DESORDEN
De acuerdo a versiones de los padres de familia, varios de los muchachos del equipo Wolfs fueron amenazados con una navaja por una señora del equipo contrario, mientras otros fueron rociados con gas pimienta en el rostro.
Quienes presenciaron la batalla campal dieron aviso al número de emergencias 911, donde arribaron elementos de la Policía Municipal, quienes se entrevistaron con los afectados, ya que cuando los uniformados llegaron los presuntos agresores ya se habían retirado del lugar.
