AGENCIA
CDMX.- El precio de la tortilla no deja de subir, se encuentra en niveles nunca vistos; en agosto el kilo subió otro 2.41 por ciento (%) o 50 centavos, hasta alcanzar un precio promedio nacional de 21.29 pesos. Además, el kilo es 13.63% más caro que hace un año, cuando alcanzaba un promedio de 18.74 pesos, y en el sexenio ha subido 40%.
En algunas entidades el kilogramo de tortilla subió por encima del promedio, hasta en 10% en el último mes y de forma anual hasta en 35.7%. Los estados que se han visto más golpeados por el alza en la tortilla son Coahuila y Guerrero, donde el kilo supera los 27 pesos, mientras que en lugares como la Ciudad de México y el Área Metropolitana se vende en 20 pesos.
En agosto, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó un crecimiento de 0.70% respecto al mes anterior, y con ello, la inflación general anual se ubicó en 8.70%, su nivel más alto en 22 años, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Entre los productos con alza de precios que más incidieron en la inflación destaca la cebolla, la cual se encareció 54.41%; el servicio de loncherías, fondas, torterías y taquerías, que se incrementó 1.20%; la tortilla de maíz, que se elevó 2.41%, y la papa y otros tubérculos, que avanzaron 6.38 por ciento.
El grupo de productos del Paquete contra la carestía y la inflación (Pacic), tuvo una tasa anual de 16.88% durante agosto.
Marcos Arias, analista de Monex, destacó que la inflación se ha consolidado muy arriba del umbral de 8.00%, que se rompió apenas en julio y, dada la evolución del panorama en los mercados energéticos, anticipó que transcurran ocho meses más antes de que descienda de estos niveles.
Si la tortilla sube, se genera un efecto cadena en la alimentación de los mexicanos, por lo cual, el gobierno aseguró que hablará con las dos principales fabricantes de harina de maíz, Gruma y Minsa, que concentran el 90% del mercado.
Según el presidente Andrés Manuel López Obrador, el aumento de los precios de la tortilla están ligados a los ajustes que ha realizado Maseca en la harina de maíz, por lo que confió en llegar a acuerdos con Juan González Moreno, presidente del Consejo de Administración de la compañía. “Si me preguntan cuál es ahora mi preocupación principal, es el aumento en el precio de la tortilla”, sostuvo recientemente el presidente.
Mencionó que estos ajustes afectan a la gente, y expresó que debe haber negocios, pero con ganancias razonables.
Según información de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), la Industria Harinera no vende tortillas y son las tortillerías de autoservicio y tortillerías de establecimiento las que definen sus precios al consumidor final.
Las tortillerías de Autoservicio, que son las que les da seguimiento la Profeco en el Pacic, sólo representa el 5% del consumo de tortilla, que la elaboran 100% de harina. El resto, el 95%, lo hacen las tortillerías de establecimiento.
Destacó que las tortillerías de establecimiento adquieren 30% de su consumo de las harineras y el otro 70% de la Industria de Nixtamal; ambas industrias se han visto impactadas por el aumento en sus costos de producción.
El maíz blanco es el principal insumo para producir tortillas, el cual se ha encarecido 20 por ciento, y que es en la Ciudad de México donde el consumo de tortillas es mayor.
Devastado el Estado y el País, con la inflación por las nubes, los altos costo de la gasolina, la inseguridad, hasta con el precio de la tortilla; y mortificándose por unas maderas y tubos.
Claro que les tocará comer menos a todos los pobres mexicanos y les tocará pasarla con cerveza porque eso el lo que les gusta tomar todo el tiempo; porque la tortilla está por las nubes.
¿Quién iba a pensar que comerte un taco de huevo sería un lujo con el gobierno que cuida a los más pobres? La tortilla y el huevo por las nubes.
Pero la gente a la que más afecta sigue apoyando al corrupto e irresponsable del Palacio Nacional, pues el plan para contener la inflación no ha dado resultados; además de la tortilla, muchos otros alimentos de la dieta de los mexicanos están por las nubes. Urge replantear la estrategia antiinflacionaria y, sobre todo, la política económica nacional.
Todo está muy caro. La gasolina que el señor Presidente no iba a subir, está por las nubes. La leche, la tortilla, el huevo, el azúcar todo sigue subiendo.
La inflación es por el mal gobierno. Si el maíz sube también la tortilla; el maíz se cose con gas, igual que las tortillas, también se paga renta, luz, empleados, papel. Y toda la materia prima.