El día del feminicidio, Andrea viajaba junto a su actual novio en un automóvil en el municipio de Jiutepec. La pareja notó la presencia de un hombre sospechoso que caminaba por una esquina, vestía todo de negro y su cubrebocas le tapaba el rostro casi en su totalidad. El individuo les produjo intranquilidad, por lo que el conductor del vehículo y pareja de la joven aceleró la marcha, pero el sujeto disparó y las balas alcanzaron a Andrea, que iba en el lado del copiloto.
Esa misma noche, en el velorio de Andrea se presentó César, ex novio de la víctima, quien dio el pésame a la familia y amigos. También participó en el sepelio e incluso mostró solidaridad ofreciéndose a apadrinar una de las misas del novenario, pero la madre y el padre de la víctima sabían que las investigaciones apuntaban a que él había sido quien mató a Andrea, pero tuvieron que disimular para no afectar las investigaciones iniciadas por la Fiscalía de Morelos.
Tras intensas investigaciones, finalmente el 27 de julio la Fiscalía de Morelos giró una orden de aprehensión en contra de este hombre por el presunto feminicidio de Andrea.
Las autoridades señalaron que la joven sufría de acoso por parte de su expareja, quien era considerado una persona posesiva, celosa y violenta.