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CDMX.- Los episodios de violencia que se registran en diversas partes de la nación, representan un doble peaje para el transporte de mercancías, servicio que ya enfrenta retos importantes tras el surgimiento de la pandemia, manifestó el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), Cuauhtémoc Rivera.
Hizo notar que lo anterior es “la circunstancia perfecta para que mucha proveeduría detenga el abasto”.
Aunque descartó que el problema genere desabasto en los comercios, sí provoca escasez, que finalmente afecta al consumidor.
Dio a conocer que la situación de violencia que se vive en México aumenta los gastos en materia de seguridad, sin contar que algunas empresas ceden a la extorsión por parte del crimen organizado e incluso, en el caso específico del transporte de mercancías, termina por camuflarse.
“Los generadores de carga importantes comenzaron a circular sus camiones sin logo, en abarrotes, buscando camuflarse y evitar ser atacados por los delincuentes”, expresó el entrevistado.
Impacto
“La violencia extrema que existe tiene distintos efectos: de inicio, los comercios se ven afectados porque paraliza la actividad económica; los negocios cercanos tienen que cerrar por temor y también se tienen pérdidas humanas, lo que es un problema grave para todos”, agregó.