De la Redacción
el buen tono
CÓRDOBA.- Mientras el alcalde Juan Manuel Diez Francos, de Orizaba, pelea y gana los juicios para enriquecer su ciudad con más propiedades, la ex alcaldesa de Córdoba, Leticia López Landero, donaba todo lo que podía al gobierno estatal.
Y es que luego de la disputa que se generó entre el Ayuntamiento de Orizaba y pastores evangélicos por el inmueble de los ex I Cinemas, hoy Centro Orizabeño de Convenciones (Coco), el alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos, confirmó que el inmueble es propiedad de los orizabeños.
Contrario a esta forma de actuar la anterior administración de Córdoba, a la cual no le bastó inflar precios, pedir moches, simular reparaciones y permitir agandalles en cafeterías públicas, entre otras cosas, sino que además el 23 de septiembre aprobó otorgar en donación la ex hacienda de Toxpan al gobierno del Estado, pocos días después de que pretendió hacer lo mismo con la aeropista.
Con esto quedó en claro que esa administración no le importaba el progreso de la ciudad, al contrario la llevó al retroceso, ya que la iniciativa solo pretendió despojar de forma descarada a los cordobeses de las propiedades que podrían detonar su economía. Esas prácticas amañadas carecen de un proyecto que justifique las donaciones y permisos otorgados.
Por esas diferencias de personas que ocupan las alcaldías, Córdoba está cómo está.