De la Redacción
el buen tono
Córdoba.- A punto de llegar a los golpes estuvieron los miembros de las dos mesas directivas que actualmente se disputan la permanencia en la Escuela de Enfermería de Córdoba ubicada también en las instalaciones de la ESBAO de la calle 22 durante una junta efectuada el pasado miércoles. Alumnos y miembros de la sociedad de padres de familia presenciaron lo ocurrido dándolo a conocer ante este medio de comunicación.
Y es que aseguran que el problema principal se debe a que después del fallecimiento de la anterior directora, quien dejó un monto de más de un millón y medio de pesos comenzó el desastre que ha repercutido en las pésimas condiciones en las que se encuentran las instalaciones y que en teoría no deberían existir, pues los alumnos pagan una colegiatura de mil 200 pesos.
“Nunca antes hubo una mesa directiva en la escuela porque la anterior directora del plantel y su hijo manejaban los ingresos, pero al fallecer -hace aproximadamente un año- dejaron un monto de más de algo así como un millón y medio de pesos, por lo que una profesora y otro profesor quedaron al frente de la dirección y desde ese momento se traen un conflicto bastante pesado”, señaló una fuente quien pidió el anonimato.
Otro testigo asegura que se han dado “por perdidos” hasta el momento un total de 100 mil pesos, mismos que fueron reportados como robados en un asalto por la saliente mesa directiva. Por otra parte, la inconformidad de los alumnos y padres de familia es que al ser una escuela con aproximadamente 80 alumnos no deberían existir dos mesas directivas,
sino una.
“Somos la única escuela que sigue con clases presenciales, se hizo una junta en línea durante pandemia para establecer la primera mesa directiva y así manejar el dinero, pero en ésta hubo personas que pedían dinero prestado y nunca pagaron”, explicó otro allegado a la institución.
Principalmente señalan a la licenciada en Enfermería, Carmina Sosol Peralta, de haber formado otra mesa directiva que pretende anteponerse a la ya conformada con anterioridad.
“Delante de los alumnos y padres de familia la mesa directiva de Carmina Sosol se puso muy agresiva e inclusive dijo que no le importaba que los alumnos se quedaran sin clase además, quiere subir la colegiatura a más del doble o sea a 2 mil 400 pesos y si vieras los baños están horribles, no hay agua ni luz”, finalizó la fuente entrevistada.
