De la Redacción
el buen tono
Córdoba.- Como ya se tenía previsto, el actuar de la médico general a cargo de la Delegación Veracruz Sur IMSS, María Magdalena Chiquito Rivera, fue el esperado.
En medio de un fuerte despliegue de “seguridad” montado con la firme intención de “protegerla” de los cuestionamientos de la prensa en torno al cúmulo de acusaciones en su contra, arribó la mañana de ayer a las instalaciones del auditorio del Hospital General Zona No. 8 (HGZ) para efectuar su tardío primer informe de labores.
Ni siquiera la conmemoración del “Día de la Libertad de Expresión” pudo conmoverla y empujarla para salir a dar la cara y aclarar (o en su defecto desmentir) ante este medio de comunicación las arbitrariedades que carcomen al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) afectando directamente a los derechohabientes. No obstante, la orden ya se había dado, específicamente: nuestros reporteros no debían acceder siendo esta quizás la oportunidad perfecta para redimirse, pero no fue así.
“Quiero refrendar ante ustedes mi compromiso de seguir fomentando la vocación, el buen trato, mejorando el servicio de calidad y atención, administrando con transparencia para que cada peso rinda al máximo en beneficio de nuestros derechohabientes”, señaló la titular a quien parece ya se le olvidó la infinidad de quejas por su trato déspota y despectivo a los trabajadores.
Entre los “trapitos al sol” que le han salido a Chiquito Rivera están contratos farmacéuticos que benefician a unos cuantos.