Mariana Gutiérrez H.
el buen tono
Orizaba.- Para el presidente del Consejo Intermunicipal de Ambientalistas (CIMA), Graciano Illescas Téllez, el decreto “fast track” de la expropiación del Acuario de Veracruz no es un compromiso genuino por la conservación de las especies y de la naturaleza o los ecosistemas, sino una cajita fuerte donde poder extraer y exprimir dinero.
Reconoció que si el Procurador del Medio Ambiente Sergio Rodríguez Cortés encontró una serie de irregularidades que se cometían con algunas especies, debió haber solicitado la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (PMA), derivado a que hay especies como el manatí, y otras más que son de otros países y forman parte de la norma 059 Semarnat-2010 y que son del ámbito federal.
La misma situación versa sobre que este atractivo turístico está arrojando aguas residuales al mar, es un asunto federal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y no de la PMA, por lo que con este tipo de acciones únicamente se demuestra que existe un interés económico y no ambiental
“Seguramente lo que está moviendo esta decisión, no es que digamos un compromiso o una verdadera convicción por la conservación de la naturaleza o de los ecosistemas o de las especies, es obvio que se habla de los manejos del dinero y los billetes”.
El ambientalista dijo que es la segunda peor decisión que ha tomado el Gobernador del Estado, desde que inició su gestión, la primera fue la desaparición del Fondo Ambiental Veracruzano.
Comentó que si bien es cierto el mandatario veracruzano ha incrementado el presupuesto a la Secretaría del Medio Ambiente es únicamente para el ejercicio de la burocracia.
“Ahora hay una gran responsabilidad, porque el Procurador del Medio Ambiente Sergio Rodríguez Cortés, nunca en su trayectoria política había estado en un cargo público no tiene el perfil profesional para hacerse cargo de esta envergadura (…) su única trayectoria es ser procurador desde hace tres años y que también ha sido una de las peores decisiones del Gobernador de Veracruz, haberlo nombrado porque no tenía ni trayectoria ni prestigio, sino por el contrario” reiteró.
Illescas Téllez comentó que el Acuario de Veracruz va a quedar en manos del Gobierno Estatal, y eso representa un grave riesgo porque no solo ha sido un proyecto reconocido a nivel nacional e internacional, sino porque ahora se va a someter a los caprichos de los cambios de un gobierno y un procurador.
El Acuario alberga poco más de 300 especies, pero existen otras más que son altamente remunerables, dijo.
Illescas Téllez ejemplificó el caso de las focas, los pingüinos, la nutria que forma parte de la norma 059 y el manatí que es una especie emblemática en Veracruz, los tiburones y delfines y otras especies más pequeñas que hoy están amenazadas de muerte ante “una mala decisión”.
