Después de recibir el más grande regalo del cielo mediante la llegada de su heredero Santiago, María Erika Sánchez Pérez y Kilo Grajales Ruiz vivieron uno de los momentos más esperados de sus vidas al llegar al altar de Dios, bendecir su amor y jurarse amor eterno para toda la vida.
Para ser testigos de ese acontecimiento se dieron cita familiares y amigos de la pareja, así como sus padres; Sergio Grajales, Bassy Ruiz de Grajales y Concepción Pérez quienes sin duda, les brindaron los mejores deseos y felicitaciones minutos antes de conducirlos al altar de la Inmaculada Concepción.
Emotiva y especial fue la misa de esponsales que presidió el presbítero Lázaro Prado, invitando a la pareja a alimentar su amor cada día de su existencia.
Convencidos de ese paso tan importante, Erika y Kilo proclamaron sus votos de fidelidad y amor recibiendo de parte del cortejo nupcial los símbolos de unión que los convertirían sin duda, en marido y mujer ante Dios.
El cariño de los presentes no se hizo esperar en ese momento, escuchándose una lluvia de aplausos que los motivo a sellar ese pacto de amor con un tierno beso.
Convertidos en esposos y bajo la marcha nupcial abandonaron el recinto, siendo rodeados de cariño por los presentes los cuales no dejaron pasar la oportunidad para brindar por su felicidad en medio de una elegante recepción a la que se trasladaron luego de protagonizar su enlace matrimonial ¡felicidades!
Mónica Chico
El Buen Tono