Nahúm Bastian
el buen tono
CÓRDOBA.- El panorama para los transportistas actualmente es complicado debido a las grandes pérdidas que tienen por el incremento de los combustibles, derivado de un aumento de hasta el 20 por ciento sobre el costo del diésel, obligando a algunos a la venta de sus unidades.
El empresario transportista, José Toribio Tress Zilli, dijo que esta situación se complicó con la pandemia provocando que se redujeran las rutas del transporte público debido a la poca afluencia, lo que mantuvo a la plantilla de conductores con un salario mínimo, esto aunado a que las tarifas permanecen como hace seis años.
“Si mi carro me da, digamos mil pesos, 500 son para diésel y a eso auméntale el 16 por ciento de impuesto diario, imagínate nosotros utilizamos 1500 litros de diésel y esos aumentos no los pasamos al usuario, eso nos lo quedamos para nosotros”.
Agregó que como transportista puede gastarse hasta 20 mil pesos diarios de diésel más 1600, correspondientes a impuestos,
Tress Zilli explicó que adquirió una flotilla de seis carros para el mejoramiento de su parque vehicular, no obstante, tuvo que solicitar prórrogas de pago a seis años pues con la situación actual no puede pagarlos como lo hacía anteriormente.
Añadió que es poco viable que gobierno apoye con becas y apoyos de 2500 pesos bimestrales, si los aumentos se ven reflejados en otros sectores y en cuyos aumentos “se les va el dinero”, ahí es cuando “la ayuda” queda pulverizada ante el incremento de productos de la canasta básica.
En crisis, dijo, es necesario el apoyo del Gobierno para el sector pues otro de los factores que perjudica es la invasión de rutas.