AGENCIA
Tijuana.- Ucranianos que salieron de su país escapando de la guerra que estalló en su país, cuando Rusia los invadió hace dos semanas han estado llegado a Tijuana para solicitar refugio en Estados Unidos.
Desde inicios de marzo, diariamente llegan hasta las distintas garitas con las que cuenta el municipio, especialmente la de San Ysidro, para intentar cruzar a Estados Unidos donde su plan es pedir asilo humanitario y que se les otorgue el estatus de refugiados de guerra.
La mayoría de ellos llegó hasta aquí, sólo con la ropa que traían puesta luego de escapar de los bombardeos en Kiev; es el caso de Nataliia Poliakova, diseñadora gráfica de 25 años, que llegó a México hace cinco días junto a un grupo de amigos, con quienes huyó de Ucrania.
“Yo nací en Crimea y (Vladimir) Putin en 2014 me robó mi casa y huí a Kiev, y ahora, se robó mi hogar nuevamente y bombardeó mi distrito”, contó a MILENIO.
Otros cuentan con amigos o familiares que los esperan en territorio estadounidense, aunque los siguen esperando pues en la frontera se les ha negado el ingreso a Estados Unidos.
“No podemos regresar a casa por culpa de la guerra, las bombas y los cohetes, Putin, y todo eso, no tenemos un lugar a donde regresar”, subrayó Nataliia con la voz entrecortada.
En un recorrido por la garita de San Ysidro se pudo constatar que personal del CBP (oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, por sus siglas en inglés) ha recorrido su retén hacia territorio mexicano, desde donde revisan los papeles de todo aquel que pretende ingresar a suelo estadounidense, como parte de los acuerdos internacionales que existen para la protección de ambas naciones.
Personal del Instituto Nacional de Migración (INM), por su parte, explicó que, en las últimas semanas, se ha registrado un aumento en la llegada de migrantes originarios de Ucrania y de Rusia que intentan cruzar desde Tijuana.
“Aproximadamente llegan unos 20 más o menos por día; obtienen un permiso para estar en la ciudad un determinado tiempo. Ellos se retiran de los albergues. Nosotros los llevamos a algunos albergues y ellos no se quedan ahí para dar seguimiento, entonces, se retiran por sus propios medios y ya no podemos darle seguimiento, ellos quieren ingresar a Estados Unidos”, reveló Claudia Pérez, agente de protección migrante del INM.